lunes, 2 de septiembre de 2013

El día más hermoso


Este no es un lunes más del año, definitivamente no. Y no porque lo diga yo, sino porque en Cuba se siente diferente: sabor a agitación y a alegría, a sueños, a sabiduría.
En las calles, desde muy temprano, familias enteras apresuran su paso para no llegar tarde a este primer día de encuentro en las escuelas. Desde pequeños en edad preescolar, hasta jóvenes universitarios, hoy todos acuden a sus centros de enseñanzas para iniciar o retomar un camino mediante el cual también tejen su futuro.
Este es un día de fiestas, aunque los protagonistas sean estudiantes y maestros, amigos, vecinos y familiares y las confituras y piñatas sustituyan a los libros, lápices, reglas y otros materiales que llegan a las manos de alumnos y profesores.
Las escuelas, universidades y círculo infantiles se engalanan para la ocasión. Los uniformes escolares lucen más brillosos que nunca, algunos llegan por primera vez a las aulas y se sienten asombrados, inquietos y lo demuestran de muchas formas: con algarabía, con muchas historias veraniegas que contar, saludando con ansiedad o simplemente observando atentamente todo lo que ocurre a sus alrededores.
Los más peques quizás se sientan un poco tímidos, aprietan la mano de su mamá, papá o abuela, como si no quisieran despegársele, pero ya ellos le hablaron de la escuela, de lo que harían, estuvieron días ensayando como lucir el uniforme, comportarse en el aula, en el horario de receso, preguntar, apropiarse de todo el conocimiento posible y también divertirse, por qué no.
Muchos sentimientos se entrecruzan, muchas expectativas se gestan. Una y otra vez llegan a mi mente mis primeros lunes de septiembre como aquellos días hermosos que, al decir de Enrique Nuñez Rodríguez: “bandadas de niños. con sus uniformes nuevos, se encaminaran hacia sus aulas, como golondrinas de luz con un canto de esperanza en la sonrisa y para los que ya no podemos ir a las aulas ,por haber transitado ese camino en otra época, será un motivo de recordación y de nostalgia, el olor a libro nuevo, a libreta sin estrenar, nos llevara, como de la mano, hacia el primer pupitre o hacia el viejo maestro, ya retirado del trabajo o de la vida, y nos conducirá por el patio del recreo junto a aquellos compañeros que hoy peinan canas. o nos devolverán el rostro querido de aquel primer amor que nunca confesamos. Y el recuerdo nos hará más buenos”. 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Ud puede comentar sobre mis post, dar sugerencias, críticas, etc, siempre con el lenguaje adecuado, sin palabras obscenas u ofensas. Todos los criterios serán aceptados, con el debido respeto. Gracias de antemano y saludos